Google financiará parte de una gigantesca infraestructura de transporte de energía eólica que suministrará electricidad de forma limpia y renovable a 4,9 millones de hogares en la costa atlántica norte de EE UU. La inversión inicial de esa inmensa red eléctrica, que comenzará a construirse en 2013, será de 1.300 millones de dólares (938 millones de euros), parte de los cuales procederá también de la firma de inversión Good Energies y de la empresa japonesa Marubeni Corporation.
El proyecto, propuesto por la empresa fabricante de conductos de transmisión eléctrica Trans-Elect, permitirá recolectar electricidad de plantas eólicas situadas en alta mar, frente a la costa atlántica de EE UU, y transportarla a tierra firme en la franja de 600 kilómetros que recorre Nueva Jersey, Delaware, Maryland y Virginia, uno de los mayores núcleos de población de EE UU, con ciudades como Nueva York, Filadelfia, Baltimore y Washington.
El potencial de esta red eléctrica será de 6.000 megavatios, el equivalente a la capacidad de cinco reactores nucleares. Será una infraestructura crucial que permitirá a las empresas energéticas tener un modo de conexión entre los campos eólicos en alta mar y los principales núcleos de consumo. Trans-Elect estima que esta red le ahorrará a esas empresas de energías renovables hasta un 20% en gastos de transporte de electricidad.
Las aguas de la costa atlántica norte de EE UU son relativamente poco profundas en una franja de unos 140 kilómetros en alta mar, lo que permite situar plataformas eólicas a suficiente distancia de la costa como para evitar la contaminación visual de las playas, que es uno de los principales reparos de los gobiernos estatales a la hora de conceder permisos. A una distancia de 30 kilómetros en alta mar, los vientos son lo suficientemente fuertes como para generar energía y las turbinas no son visibles desde la línea de playa.
«Esta nueva gran red en la costa Atlántica nos permitirá desbloquear unos recursos muy importantes no utilizados hasta el momento, creando los cimientos para una nueva industria y para la creación de miles de puestos de trabajo en la industria americana», dijo ayer en conferencia de prensa el consejero delegado de Trans-Elect, Bob Mitchell. Esa empresa estima que la construcción de la nueva red creará entre 133.000 y 212.000 nuevos puestos de trabajo a largo plazo.
Aunque esta no es la primera ocasión en la que Google invierte en un campo que no es el del desarrollo de software y la publicidad en Internet, sí que es una de sus inversiones más fuertes en un mercado emergente. De momento, se ha comprometido a financiar un 37,5% del capital del proyecto, cuyo precio se estima en 5.000 millones de dólares (3.600 millones de euros).