Me quedo

Entre libros y risas, entre labios y suspiros, rayos y centellas la noche se va.
El sabio correr del tiempo, ya no son tan amargos los recuerdos, hace que la vida y la pared roja donde dejaste mi corazon tirado; empegotado, no parezca tan fea.

Entre el silvido del tiempo, entre el silencio y el viento, entre la vida y tus ojos, entre mi palpitar y tus enojos.

Entre tu falda y el cemento, entre tu blusa y tu acento, entre tu cuerpo y el quejido de aquella puerta que cerraste queriendo.

Entre las cuatro paredes de la habitacion, entre tus gritos y el silencio, entre la vida y el tiempo, entre el maldito reloj y tus cuentos.

Hoy me quedo, entre todas las cosas, entre mis manos vacías, entre tu vida y la mía, entre las notas del zinc, entre la lluvia y el fin.

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